Fortaleza genovesa
Durante la Edad Media, la Fortaleza genovesa de Feodosia representaba la fortificación más gruesa y poderosa de Europa. Claro, ya ha perdido su severidad y magnificencia, pero hoy en día sus torres y murallas que se yerguen en diferentes partes de la ciudad impresionan y fascinan a la vez.
El complejo defensivo grueso surgió ahí en el siglo XIV gracias a travesías de genoveses que lo levantaron para la protección de Kafa (nombre antiguo de Feodosia), su propiedad más grande de Crimea. La fortaleza fue muy fortalecida y tenía dos líneas de la defensa: la exterior y la interior, o sea, la ciudadela. La ciudadela que rodeaba la acantilada cuesta de la colina Karantinniy sobre el litoral del mar Negro, albergaba el centro administrativo de la ciudad medieval. Ahí, estaba ubicado el palacio de cónsul, tesorería, residencia del arzobispo, tribunal cuyos balcones servía de la sede para anunciar las leyes de cónsules, asimismo almacenes y tiendas (Kafa fue un importante sitio de tránsito del comercio internacional). Las murallas gruesas de la ciudadela tuvieron 718 metros de longitud, 11 metros de altitud y 2 metros de anchura.
El nivel defensivo exterior que se extendía a 5.5 kilómetros y contaba con 26 torres y murallas que los unía. Cada torre, según la tradición genovesa, tenía su propio nombre que originaba del nombre de cónsul que encabezaba la construcción, asimismo el nombre de uno de los Papas de Roma. Los muros de fortaleza contenían unas cuantas puertas tanto terrestres como navales de Kafa. Para fortalecer la defensa, alrededor del castillo fue hecho el foso llenado de agua. Desempeñaba muchas funciones: fue no sólo un medio defensivo, sino el canal para drenaje del agua en mar.
A finales del siglo XVIII, después de la anexión de Crimea por Imperio ruso, la fortaleza perdió su valor protector y la mayoría de sus edificios fueron desmontados. El fragmento más relevante que ha sido conservado hasta nuestros días es la muralla meridional de la ciudadela con dos torres: San Clemente y Crisco. La primera obtuvo su nombre en honor de Papa Clemente VI que apoyó la construcción de la fortaleza y defendía las puestas del castillo. La segunda –torre de Crisco-, servía de fortificación para la parte media de la muralla.
Cerca de la ciudadela, por el camino al mar, está la torre Dokovaya que defendía la parte oriental de la ciudad y fue las puertas marítimas. Al lado están baños turcos, puente y unas iglesias del siglo XIV.
Además, se puede ver unas cuantas torres en distintas partes de Feodosia. Una de las más relevantes y más conservadas es la torre de San Constantino que se encuentra en el parque Yubileiniy en el paseo marítimo. Actualmente, se la consideran la tarjeta de visita y el símbolo de Feodosia.
Cómo llegar. Se puede llegar en el autobús Nº1 (la parada Most). El paseo a pie llevará 15-20 minutos del centro de la ciudad.