Zaporizhia

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La ciudad que se extiende a ambas orillas del río Dniéper es uno de los centros más grandes de Ucrania, relevante núcleo industrial y corazón cultural del Sur del país, y además, es un importante puerto fluvial. En el mundo, Zaporizhia es reconocida como la cuna de vólnitsa de cosacos que hasta hoy día conserva atentamente las tradiciones de los militares antiguos.

La historia de la ciudad es estrechamente ligada a los famosos rápidos del Dniéper y la isla de Jórtitsia. En XVI, los cosacos, ante todo grupos de personas de diferentes capas sociales, preferentemente siervos huidos que querían su libertad, fundaron Sich de Zaporozhie que luego se convirtió en la república libre de los cosacos. Ellos defendieron las tierras ante los tártaros y controlaron navegación fluvial en el río Dniéper. Además, ellos participaron activamente en la lucha de la independencia nacional contra los invasores polacos. Pero muy de pronto, por el mandato de Catalina II de Rusia, Sich de Zaporozhie fue destruida en 1775 y los terrenos meridionales fueron usurpados por el Imperio ruso.

Con fin de proteger las fronteras meridionales del kanato de Crimea, la emperatriz decidió construir cerca de la isla de Jotitsia la fortaleza de Alexandrivsk. De repente, cerca de la ciudad se formó arrabal a donde llegaron los cosacos de Zaporozhie. La oblación de la ciudad provincial que obtuvo el nombre de Alexandrivsk iba creciendo lentamente y luego se convirtió en un importante nudo de transportes. Sin embargo, la ciudad casi no desarrollaba durante el siglo XIX.

Y sólo a principios del siglo XX, cuando Alexandrivsk cambió de nombre y se hizo Zaporizhia que significa “está detrás de los rápidos”, obtuvo un empuje considerable para su fomento. EN la ciudad se construyeron la central hidroeléctrica Dniéper que fue considerada la más grande de Europa. Junto con ella, paricieron muchas fábricas y plantas metalúrgicas. En los años 20 y 30 del siglo XX, Zaporizhia se convierte en una grande ciudad industrial y fue uno de los más relevantes centros producticos y de energía eléctrica de Unión Sovietica.

La ciudad sufrió mucho daño durante la Segunda Guerra Mundial pero después logró reconstruirse muy rápidamente y recupero el poder de su complejo industrial. Justo entonces fueron construidos los puentes de dos niveles que unen dos orillas de la ciudad, la derecha con la izquierda. Actualmente, constituyen el lugar de interés principal de valor arquitectónico y de ingeniería. De uno de los puentes se abren las vistas maravillosas a la presa Dniéper y leyendaria isla Jórtitsia donde se halla complejo histórico y cultural “Sich de Zaporozhie” (“Zaporozhskaya SIch”), el museo de la historia de los cosacos de Zaporozhie y famoso teatro de caballos que represento lo característico de la ciudad.

El encanto especial a Zaporizhia lo comunica los edificios peculiares del estilo imperio de Stalin que son decoradas con las molduras ecléticas, colonas clásicas y pórticos neoclásicos. La mayoría de ellos está en la avenida Lenin por eso es posible admirarse de ellos dando los paseo lentos por la calle más larga de Europa. Los turistas pueden aprovecharse de los muses originales de la ciudad, entre los más asistidos son el museo de la historia de arma y el de los coches retros, o sea, antiguos y viejos.

Los alrededores de la ciudad también guardan un montón de logares de interés. Ante todo, cabe mencionar los kurganes (sepulcros) que se encuentran muy frecuentemente en los terrenos de Zaporizhia. Pero el más interesante es el museo “Sepulcro de piedra” (Kamiana mohila) que se representa una acumulación de piedras grandes que los residentes de esos terrenos usaron de un santuario. Y claro, óblast de Zaporizhia es bañada por el mar más caliente y más tierno, el de Azov, que atrae a los turistas con sus balnearios. El más famoso es Berdiansk que posee los sanatorios con las playas amplias de arena y hace mucho se convirtió en un sitio amado para el reposo no sólo de los ciudadanos de Zaporizhia sino de los huéspedes extranjeros.

Últimamente, muchos y muchos viajeros descubres las hermosuras de Zaporizhia. Aquí vienen no sólo para sorprenderse de únicos lugares de interés sino sumergirse en la historia del pueblo ucraniano, sentir el espíritu de libertad y energía de los cosacos que impregna toda la ciudad.