Palacio de Potocki

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Lviv siempre sorprende por una infinidad de los sitios por descubrir. Así, en el fondo de los edificios antiguos apretados en el centro de la ciudad se destaca mucho el Palacio de Potocki, escondido tras la verja calada en una de las calles que como rayos corren desde la avenida principal de la ciudad. Su edificio elegante cuyas formas arquitectónicas hacen eco con los castillos franceses de la época de clasicismo está considerado uno de los más interesantes y bellos monumentos de arquitectura de Lviv.

A mediados del siglo XIX, en su lugar estaba un parque en el centro del cual fue emplazado un pequeño cazadero perteneciente a la ilustre dinastía polaca, Potocki. Según afirma una versión, fueron propietarios de los terrenos de acá desde el siglo XVII. En 1860, el conde Alfred Józef Potocki ordenó en vez de la mansión de caza, construir el palacio de gala destinado a las recepciones y cumbres. Debido a los gustos refinado del conde, fue escogido la variante del afamado alarife francés. Después, fue encargado el arquitecto polaco Julian Cybulski quien adoptó y realizó el proyecto. Por desgracia, el propio cliente no vio su casa, ya que había muerto antes de que el castillo fuera finalizado. Así, su hijo se vio obligado a llevar a cabo la edificación.

En 1880, el lujoso palacio cuyo aspecto combina armónicamente los rasgos característicos de barroco y clasicismo fue finalizado. Representaba un edificio de tres pisos con una mansarda alta y fachadas que jactaron de un ornamento elegante. Desde la calle de Kopernika se podía acceder al patio del edifico a través de la puerta flanqueada con dos alas. Además, el patio contaba con aparcamientos para las carrozas, ya que en el palacio solían celebrar los encuentros oficiales. La parte posterior del palacio de Potocki contaba con una terraza desde la cual se podía bajar la escalera al parque.

El interior del palacio es tanto elegante como el exterior. Su diseño hace eco con el estilo del rey Luis XVI de Francia. La planta baja alberga unas salas con un diseño individual y están en completa conformidad con su nombre: la Roja, o la de baile, la Azul y la de espejos. Todas ellas están decoradas de molduras, doraduras y mármol de colores. Las paredes cubiertas con las sedas de colores correspondientes disponen de lienzos de destacados maestros europeos. Las talladas chimeneas de mármol están cubiertas por el bronce dorado. Cada habitación del palacio de Potocki tiene un mobiliario exquisito de la madera valiosa.

Afortunadamente, sus riquezas y abundancias han sido conservadas hasta hoy en día. Sólo una vez, el palacio tuvo una amplia renovación después de un accidente que tuvo lugar en 1919. Entonces, durante una maniobre fracasado de un avión militar, los pisos superiores del edificio fueron quemados. La renovación llevó unos años. Después de la Segunda Guerra Mundial, el palacio albergaba distintos establecimientos, y hasta los principios del siglo XXI ahí estaba alojado el registro civil.

Actualmente, ahí están el Museo de arte europeo que forma parte de la Pinacoteca de Lviv. Sus salas cuentan con las exposiciones de interiores antiguos y pintura europea de los siglos XIV al XVIII. Últimamente, en el parque del palacio de Potocki abrieron un parque de las fortificaciones en miniatura.

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