Palacio de Rákóczi-Schönborn

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A pesar de que Mucacheve se suele asociarse al espléndido Castillo Palanok, ahí hay otros monumentos arquitectónicos que dan la posibilidad de leer la historia muy larga de esa ciudad viva. Uno de ellos es un palacio encantador Rákóczi-Schönborn que durante su auge sirvió de la residencia para los reyes de Mucacheve. Es un elegante edificio barraco-renacentista que es considerado uno de los más hermosos de la ciudad.

A mediados del siglo XVII la familia transilvana de Rákóczi apoderó de Mucacheve, pues, desde entonces inició la historia del palacio. En 1667, los nuevos propietarios de la ciudad empezaron la construcción de su residencia familiar. El palacio barroco, que se yergue en el centro de la ciudad, representaba una estructura cuadrada de un piso de la piedra natural que, además, fue rodeada por una galería abierta. La fachada del edificio fue blanco con un leve tinto rojo por las esquinas. De ahí proviene su apodo, la Casa Blanca que mantiene vivo hasta hoy día.

Un siglo después, tanto Mucacheve como el palacio cambiaron de sus propietarios. Entonces se convirtió en una residencia oficial del conde austriaco, Erwein Schönborn. Durante su gobernación, el palacio obtuvo su exterior que se puede contemplar actualmente. En 1726, bajo el orden del famoso alarife alemán –el autor de los edificios más magníficos de Europa– se inició la renovación muy amplia.

Por lo cual, el palacio obtuvo una nueva forma y un piso más que fue hecho del ladrillo. Las galerías externas fueron desmontadas y la entrada central fue ornamentada por los portales elegantes de agregado de mármol. Además, la fachada fue adornada con el retrato escultural de Francisco Rákóczi II, uno de los propietarios de la residencia. Así, el lujo barroco fue equilibrado por la levedad elegante del estilo renacentista.

Pese a las remodelaciones amplias, muchas detalles tanto del exterior como del interior quedaron invariables. Las bóvedas de arista de la parte vieja, las ornamentaciones de piedra de las puertas y ventanas, las molduras peculiares del diseño de las salas, todo ello no fue alterado desde los tiempos del reinado de príncipes transilvanos. Además, el palacio alberga el jardín abundante, y el pozo antiguo. Hasta hoy día, el territorio del palacio está rodeado por una tapia y magníficas puertas forjadas. Dentro del palacio se puede contemplar los interiores lujosos que fueron conservados desde el siglo XVII.

Hasta 1928, el palacio sirvió de residencia para los gobernadores de Mucacheve. Después albergaba la escuela secundaria, el colegio del arte, y actualmente, ahí está uno de los edificios del Instituto del arte de Zacarpatia.